GREGORIO
GAVIER: Senador nacional y Gobernador de Córdoba entre
1883 y 1886. Casado con la prima hermana de las esposas de Julio Roca y de
Juárez Celman, pertenecía a la elite liberal de la ciudad. Su gobierno promulga
en 1885 la ley de desarticulación de las comunidades y organiza el definitivo
reemplazo de la posesión comunitaria de la tierra a la propiedad privada.
Aprovecha para fortalecer su patrimonio familiar con la escandalosa compra
venta que ampara su propia ley. Ya sea personalmente o por su testaferro Manuel
J Paz se apodera de muchísimas propiedades, entre ellas las de los comuneros: Damiana
Sosa, Cristian Moyano de 18 años, Gregorio Miguel Tablada y los derechos de
niños como Jesús de 6 años, Justa de 10 año, Cirilo de 7 años, Aurelio de 4,
Viviana Sosa, Gregoria Carranza de 6 años. El Gobernador no pudo disfrutar de los lotes
arrebatados, pues falleció 5 meses después que concluyó su gestión. Su
encumbrada familia sí. Gavier se quedó con al menos 30 hectáreas.
RAMÒN J
CÀRCANO: abogado y dos veces gobernador de Córdoba. Desde
joven militó en política, convencido del liberalismo. Siendo ministro de
gobierno, justicia y culto, escribió acerca de las tierras comunales indígenas,
pero refiriéndose explícitamente al Pueblo de La Toma dijo: “estas comunidades
son estanques de barbarie en medio de la población civilizada, se limitan a cultivar
la tierra en la cantidad necesaria para asegurar su alimento durante el
año…dividir la propiedad común y señalar a cada comunero el lote que le
corresponde y si esto no es posible enajenarlo en remate público…” Él estaba
convencido de ser la civilización y atrapó con sus garras las tierras de las familias comuneras Garay y Bravo, Servando y
Juana Sosa, Juan Sosa, Ciriaca Romero,
Nicasio Villafañe, Francisca Moyano de 3 años y Antonia Moyano de 1 año, a
Ceferina Salinas, Francisco Sosa, Juana Soria, Tomasa Salinas, derecho de
campo. Posesionó 25 hectáreas y enriqueció con la reventa “del
estanque de barbarie”
ANTONIO
DEL VISO: Gobernador de Córdoba entre 1877 y 1880,
previamente participó del poder judicial y del poder legislativo. Su llegada al
gobierno provincial favoreció al liberalismo. Él ya había afrontado juicios
contra comuneros del Pueblito. Una vez promulgada la ley de 1885 se lanzó a
quedarse con tierras del Pueblito y así lo hizo poseyendo las tierras de
Gregorio Ontiveros, y los derechos de los niños Leonardo ,Rosario y Cecilia;
Facunda Villafañe, Vicenta Ferreyra, Severa Oyala y de muchos otros. Se calcula
que quedó por lo menos con 15 hectáreas.
AURELIANO
BODEREAU: Perito agrimensor de mucha actividad durante
el juarismo. Mensuró por encargo de la municipalidad y del gobierno diversos
territorios como por ejemplo Villa Allende, Bº Yofre y otros. Hombre de
confianza de los gobernadores Juárez Celman y Gregorio Gavier, se le confía la
mensura y loteo del Pueblo de La Toma. Hacia mediados de la década del 80 es
enjuiciado por el Banco Nacional de Liquidaciones, entonces se ve obligado a
transferir las propiedades a su hijo Enrique. Mensura y valora los terrenos. Al
concluir su tarea técnica comienza su negociado inmobiliario. Entre los
comuneros de la Toma son presionados a venderle sus derechos territoriales:
Teodora Villafañe, Anselma Villarreal, Bernardo Carballo, Ignacio Ortiz, Jesús
Ontiveros, Eduviges Villarreal y los
derechos de su hijo Domingo de 2 años; les compra a Gualberto Bustos, Joaquín
Salinas y en 1910 estas familias, dueños ancestrales, han quedado sin tierras.
Se queda por lo menos con 10 hectáreas.
CARLOS
CASSAFFOUTH: Ingeniero argentino famoso por la
construcción del dique San Roque. Llamado por el entonces gobernador de Córdoba
para la construcción de dicho dique. Tras la construcción del dique San Roque
fue detenido por artimañas de sus enemigos que cuestionaban el murallón
contenedor del embalse. Su cárcel fue injusta y generó un aurea martirial sobre
Cassaffouth. No obstante, el ingeniero consoló sus penas negociando de forma
oportunista los terrenos “de los indios del Pueblito·”. Atraído por el negocio
inmobiliario: compra lotes a los comuneros Alejandra Balbuena, Manuela Canelo,
Pabla Canelo, Lorenza Carpio, Cruz Balbuena, Carmen Cuello de 12 años, Felipe
Rosales, Rosario Ceballos, Francisco Cortés, Lucia Avalos y otros. Posiblemente
2 hectáreas.
Muchos otros compraron o tomaron tierras del Pueblo de La Toma, entre ellos ISMAEL GALINDEZ agrimensor del Pueblito, sabía lo que compraba y compró mucho, alrededor de 20 hectáreas, siendo que no contaba con poderío económico, ¿raro no?. Otro fue GIL SMITH, médico supuesto catedrático en Utrecht que el presidente había llamado y por ese momento deseaba integrar el claustro de profesores en la UNC, no se lo conoce con fortuna, pero sí que vendió y revendió 30 hectáreas ¿raro no? Y por último RAFAEL PICCININI también médico, se decía obstetra, y aspiraba enseñar en nuestra universidad, como el anterior es extranjero que desconozco su poder adquisitivo, pero puso la firma en casi 20 hectáreas ¿raro no?
EL COMUNERO